martes, 31 de mayo de 2011

una pregunta del martes en la oficina...

De esto se trata no?

De que han dejado ciegos ante este mundo nuestro, o nos hemos dejado ciegos nosotros mismos?
Una buena pregunta...mmm...no...no tengo la respuesta....

Pero si me he propuesto abrir los ojos, y si puedo, casi aventurandome tratare de abrir los tuyos.
Vivo a 10 cuadras de una plaza, casi bosque...la conocí hace 1 año...la pregunta es porque?

No...

La pregunta es porque vos no la conoces?

Aventurarse... probar,,,fallar, cosas que van a seguir pasando "mientras estemos vivos" mientras nos animemos a vivir, a sentir y abrir los ojos ante esos espacios que nos quedan tan cerca...y simplemente hacemos como si no estuvieran allí.

Aveces la oficina me pone en este humor de cambio, de apertura y aventura...

viernes, 27 de mayo de 2011

Kent - 747


Desde el jueves pasado tengo un nuevo elemento o instrumento en mi vida. Claramente, no se como llamarlo, ya que vendría a ser una cosa nueva, que traerá aparejados los cambios pertinentes.

Pero para que andar haciendo tanto misterio, se trata de un nuevo y fantástico, reluciente y brillante “disyuntor”. Sí…sí…como lo escucharon…

DIS - YUN – TOR…

Qué les puedo decir, para mi suena más raro que todo lo que uds. Puedan estar pensando en este momento, sobre un disyuntor. ¿Para que catzo quiere un disyuntor en su vida? ¿De donde lo saco? ¿Dónde me compro uno?

No lo se, digamos que esta a estrenar…creo que esta noche lo estreno, veremos como el va para saltar cuando mi maldita ansiedad, cualidad no grata, me invada y quiera hacer de mi una bola de nieve, un día de viento en la playa, insoportable.

Su funcionalidad sería la de saltar en caso de emergencias, sea por porte de luz, por falta de pensamiento racional o ansiedad en su máxima expresión. No todo mi entorno a tenido el placer de deleitarse sobre estos momentos, gracias a dios.

Bueno en fin, ya lo tengo y estoy viendo como prenderlo, cuando usarlo y cuando lo pueda naturalizar y funcione de forma automática en mi vida. Disyuntor, o vendito disyuntor, salta por mi.

Ahora me “disyuntea” la música, elixir de la vida cotidiana.

Salta por mi disyuntor, serás bien recompensado…enséñame a parar antes de que se corte la luz. Enséñame a controlar ese viento, a protegerme de la arena que pica.

Salta por mí, sabes de lo que hablo.

Saborear.

Ese calor, mescla de cosquillas y vergüenza.

Arrugo los pies.

Levanto los hombros.

Saborear, saborearte.

Ese desvestir desprolijo, sin sentido, sin método.

Arceo la espalda.

Respiro profundo…ruidoso, casi exagerado.

Saborear, saborearme.

Ese mismo calor, se hace cada vez mas intenso, más insoportable.

Cierro las manos.

Muerdo los labios.

Saborear.

Saborearte.

Saborearnos.